Dicen que la danza te hace sentir libre. Y, no os lo vamos a negar. Cualquier bailarín, ya sea de ballet, de danza contemporánea o de hip hop, puede afirmarte que, mientras baila siente que toca el cielo. La danza tiene ese poder o don, como prefieras llamarlo, que hace sacar lo más profundo e íntimo de ti en lo que puede parecer inocentes movimientos.

Que nos gusta bailar, sí. Que nos gusta apuntarnos a un sarao, totalmente. Y por supuesto no lo dudamos cuando Andrea Irurzun, en su residencia de ADN danza navarra contó con nosotras. Nos hemos encargado de diseñar y su vestuario para la danza contemporánea que crea en el proyecto RE-DES. Su interpretación de las redes sociales sobre el escenario no dejará a nadie indiferente.

“El baile es la música hecha visible”.

G. Balanchine
Teatro Ansoáin / Pamplona

Pues bien, el vestuario y la danza, también es la expresión de nuestra personalidad. Son, sin duda, puro arte entendiendo éste como: “ Manifestación de la actividad humana mediante la cual se interpreta lo real o se plasma lo imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros”

Por eso mismo, van de la mano. Ambos expresan sensibilidad por lo bello, admiración por lo estético, búsqueda de sensaciones y libertad. Imagínate, dos artes unidas… Pueden llegar a ser belleza pura: una bailarina con su falda, un color y una textura perfecta, todo unido…

Pero para llegar hasta ese momento perfecto, la verdad hay que contarla. Hay horas de sueño perdidas, días y días de conversaciones, reuniones, coordinación. Enlazar el trabajo y el pensamiento creativo de la obra y buscar como ayudar a potenciar el mensaje. Ahí es donde el vestuario genera magia en el escenario. Cuando quizás pasa desapercibido o no, pero cumple la función que tiene, ayudar a crear magia y dar fuerza al espectáculo tal y cómo la dirección creativa busca.

Y así, tras diseñar, cortar, coser y probar las perfectas prendas, sólo queda esperar a la actuación. Prepararte en los camerinos, ir al baño 10 veces por los nervios, escuchar la música del grupo anterior, reirte con tus compañeras de danza y dar pequeños saltitos de emoción o de calentamiento, !ya no lo sabes reconocer¡. Es tu turno.

Sales al escenario y paradójicamente ves muchísima gente sin exactamente ver a nadie. Respiras hondo y, ese sentimiento de nerviosismo se transforma en sensación de libertad cuando escuchas el comienzo de tu pieza. Y, te dejas llevar. De repente, todas esas horas de repeticiones y trabajo expresan su plenitud en un movimiento aparentemente innato bajo un manto de organza de horas de sueños por cumplir.

El pasado 30 de Agosto, se realizo pequeña presentación con nuestro vestuario para RE-DES de Andrea Irurzun. Os adelantamos parte de lo que es nuestra memoria, cómo hemos trabajado y unido conceptos juntas para llegar a crear un vestuario conceptual todavía en proceso.

Descarga aquí MEMORIA CREACIÓN DANZA – REDES